NÚMERO 1: Cepillar el cabello todos los días
Tan fácil como suena, intenta cepillar tu cabello al menos 3 veces al día. No tardarás prácticamente nada y con esto conseguirás estimular la circulación sanguínea de tu cuero cabelludo haciendo que este crezca de forma más saludable.
NÚMERO 2: No lavar el cabello todos los días
No hay una respuesta correcta a la pregunta «¿Cada cuanto tiempo debería lavar mi cabello?», todo depende del tipo de este. Por ejemplo, a pesar de que el cabello graso se ensucie con más facilidad lo recomendado es lavarlo 4 o 5 veces a la semana, ya que sino el cabello acabaría siendo más graso. Para el cabello seco se recomienda lavarlo cada 3 o 4 días, sino aumentaría la sequedad.
NÚMERO 3: Utiliza siempre agua fría para enjuagar tu cabello
El agua caliente perjudica nuestro cuero cabelludo, por lo tanto es recomendable hacer el último aclarado con agua fría o cómo mucho templada, así conseguirás que tu pelo quede más brillante y sedoso, con agua caliente podría quedar más seco y sin brillo.
NÚMERO 4: Evitar el exceso de calor
Al exponer nuestro cabello a altas temperaturas este acaba perdiendo brillo y vida con el paso del tiempo. Al utilizar planchas o secador hace que nuestro pelo se debilite así que se recomienda reducir la frecuencia con la que usamos esta clase de aparatos además de utilizar un tratamiento hidratante para nuestro cabello cada vez que tengamos que exponerlo al calor.
NÚMERO 5: Mantener una dieta saludable
No sólo hay que cuidar nuestro cabello por fuera, sino también cuidar nuestra propia salud. Cómo ya sabrás, para llevar una dieta ideal se recomienda la fruta, verduras, pescado, frutos secos, productos lácteos y no nos olvidemos de beber una gran cantidad de agua.
Sigue estos consejos y verás que, con el paso del tiempo, el aspecto de tu cabello mejorará considerablemente.